Estábamos hablando, al menos yo quería que me hicieras caso, trataba de comunicarme contigo pero era inútil, siempre estabas muy ocupada, cocinabas, trabajabas, veías una película en la televisión, no importaba, no tenías tiempo para mí. Pensé que esto nunca sería posible. Los días pasaban y yo esperaba poder compartirlos contigo, sin embargo tu me ignorabas.
Algunos días eran mejor que otros, te ponías triste, yo quería consolarte pero en vano lo intentaba, no me escuchabas, sé que si me hubieras hecho caso ya estarías contenta, pero no, decidiste ignorarme, y hacías las cosas a tu modo. Conforme pasaban el tiempo, poco a poco vi que estabas recuperando la alegría, habías comenzado a probar cosas nuevas que a mí no me gustaban.
Un año se cumplió que no me dirigiste la palabra, muy temprano te levantaste fuiste a aquel lugar, sorteando los obstáculos y ahí dejaste un ramo de flores, me hiciste enfrentar la realidad que había querido evitar. Mi nombre en una lapida que solo el tiempo podría borrar…
Yodaniboy
Fuente: Textuorema
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