La región más transparente de Carlos Fuentes

Nací y vivo en México D.F. esto no es grave. En México no hay tragedia todo se vuelve afrenta.

Hasta para ser payaso se requiere integridad e imaginación.

Todas las mexicanita rubias, elegantes, vestidas de negro, convencidas de que dan la tono internacional en el triste país pulguiento y roído.

Si lo principal es la armonía, puedes amar a quien gustes, no como esos merengueros, que insistieren que te acuestes con viejas petaconas y apestosas.

Pequeños y ridículos debían sentirse cuando tratan de explicar algo en este país.

Nada es más admirado en México que el gran chingón.

Es que en México siempre anda la casa de un redentor.

Aquí no hay más que una verdad: o hacemos un país próspero, nos morimos de hambre.

El bienestar definitivo del país, se lo digo, está por encima de cualquier satisfacción patriotera.

Tú eres el amor como la muerte, mas, como océano, capaz de contener a millones de cuerpos en su fondo, de tragarlos y nunca devolverlos.

Pero en la muerte nunca nos olvidan, hijo, ya verás.

Aquí nos tocó. Qué le vamos hacer. En la región más transparente del aire.

Citas del libro: La región más transparente de Carlos Fuentes